La barba se ha convertido en tendencia y no parece que este hecho vaya a cambiar próximamente. Es más, cada vez encontramos una gama más amplia de productos dedicados al cuidado y acondicionamiento del vello facial. Por eso, si tienes una barba poco poblada y te gustaría conseguir una más lustrosa, te traemos los mejores trucos para lograrlo.
Seguramente te preocupe la escasa densidad de pelos que aprecias en tu mentón, o eres incapaz de que te crezca vello más allá de las patillas. Pero tranquilo, el primer paso es aprender a entender tu rostro y buscar los remedios que mejor se adapten a él. Y es que no es lo mismo que no te crezca el vello de manera homogénea a que tengas zonas completamente imberbes.
De una forma u otra, la clave reside en ser constante y tener paciencia. Dejar que tu barba crezca es un compromiso, así que mentalízate de que el proceso será largo, ¡pero merecerá la pena!
Tampoco olvides que no hay dos barbas iguales, pues ellas, como sus dueños, son únicas. Y todas necesitan tiempo y cuidados. Así que sigue leyendo para descubrir qué puedes hacer para ponerle remedio a este problema.
Empecemos por lo principal
Más allá de poner en práctica técnicas especiales, antes tienes que tener en cuenta los cuidados básicos. Como, por ejemplo, que te mantengas hidratado, lleves una dieta equilibrada y duermas correctamente, ya que esto ayudará al crecimiento de tu vello gracias a que mejora el riego sanguíneo e incrementa la actividad hormonal. Y encima también estarás más sano, todo ventajas.
Lo primero que puedes probar es algo tan sencillo como eficaz: deja que tu barba crezca libre, para que veas hasta dónde llega tu vello y si con una mayor longitud eres capaz de cubrir las calvas que aparecen en tu rostro. Para que lo haga sin resecarte la piel, ayúdate de un buen tónico. Y resiste la tentación de meterle las tijeras en cuanto los pelillos empiecen a descontrolarse.
Después, pasadas entre 4 y 6 semanas, ya podrás darle forma. Llegados a este punto también deberás limpiarla con agua tibia, más fresca que caliente, puesto que de esta manera estimularás el riego sanguíneo de esa zona. No olvides date un masaje suave mientras la lavas con un champú adecuado.
Otro buen truco es cepillarla en la dirección de su crecimiento natural con cierta frecuencia y con un peine especial. Si lo haces con los pelos de tu cabeza, ¿por qué no ibas a hacer lo mismo con tu barba? De esta manera podrás eliminar las células muertas de la piel, oxigenarás la zona y podrás cubrir con vello las zonas de menor densidad capilar.
Apóyate en productos específicos
La cosmética no deja de avanzar. Y en la actualidad resulta sencillo encontrar multitud de productos especialmente diseñados para los hombres. Entre ellos se encuentra el tratamiento Lumberjack Growing, un aceite que hidrata la piel a la vez que estimula el crecimiento del vello gracias a que contiene aceites esenciales de coco, jojoba y romero.
También puedes acudir a los suplementos vitamínicos para fomentar el crecimiento de uñas y pelo. Así, si consumes biotina de manera diaria, tu vello crecerá mucho más rápido. O añade a tu dieta alimentos ricos en vitamina B1, B6 y, en especial, B12 (como salmón, legumbres o frutos secos), ya sea de manera natural a través de su ingesta o mediante cápsulas que encontrarás en farmacia.
Por último, si te echas Minoxidil en las calvas ayudarás a evitar estos “parches” que aparecen en tu rostro. Este activador del crecimiento del cabello lo puedes encontrar bajo distintos nombres, aunque debes saber que, para que funcione, el uso debe ser prolongado.
U opta por los remedios caseros
Si eres de los que prefieren optar por las soluciones de toda la vida, aquí encontrarás lo que buscas. Por ejemplo, puedes exfoliar tu piel con una sencilla crema hecha a base de mezclar un yogur natural con dos cucharadas de azúcar, de manera que la dejes bien limpia y así la barba pueda crecer mejor. En menos de 15 minutos tendrás el rostro listo para que surja la magia.
El aceite de oliva se convertirá en tu aliado, ya que es un potente hidratante natural. Una vez a la semana masajea tu barba con él, dejando que empape bien tu rostro, de forma que impulse el vello a crecer. También puedes mezclar unas gotas de eucalipto con agua tibia y repetir el proceso de masaje -en esta ocasión al menos dos veces por semana-, e incluso aplicarte el juego de una cebolla antes de dormir y aclararlo a la mañana siguiente.
Si además de hacerlo crecer quieres cubrir las canas y conseguir un efecto frondoso, crea una mezcla a base de zumo de limón, una cucharadita de canela y dos de miel. Extiende con ayuda de un peine la masa por toda la superficie de tu barba, déjala reposar unos 45 minutos y retirala con agua. El proceso es algo incómodo y pegajoso, pero te aseguramos que los resultados merecen la pena.
El posible origen del problema…
Aunque pueden existir diferentes motivos para que tu pelo no crezca como quieres, uno de los más frecuentes suele estar relacionado con los andrógenos. O lo que es lo mismo, las hormonas sexuales masculinas, entre las cuales están las encargadas de regular el crecimiento del vello corporal. Pero ojo, esto no quiere decir que aumentando el nivel de hormonas lograrás una densidad mayor, para nada.
Por otro lado, los factores genéticos influyen en la distribución del vello por todo tu rostro. Y este es otro elemento que tampoco se puede controlar. Aunque, como ya hemos dicho, es algo habitual y que afecta a todos los hombres, así que no te preocupes, que siguiendo nuestros consejos serás capaz de ponerle remedio.
… Y cómo remediarlo: crea tu propia rutina
Como hemos dejado claro a lo largo del texto, el crecimiento y estado de la barba está estrechamente relacionado con el estado de tu piel. Por eso, lo primero que debes hacer es exfoliar tu rostro para eliminar las pieles muertas.
A continuación, hidrátalo con algún producto específico para la cara y, a ser posible, que contenga eucalipto entre sus ingredientes, ya que esta planta promueve el crecimiento del vello. En esta línea, tampoco olvides limpiarte la cara a diario, como comentamos más arriba. Con agua fresca y un jabón especial para tu barba, mejor que mejor.
Además, evita las situaciones de estrés -que como consecuencia desencadenan la pérdida de cabello-, intenta hacer ejercicio semanalmente y mantén una alimentación sana en la que incluyas productos ricos en proteínas (como huevos o pescado), que también ayudan a que el vello crezca.
Una vez hayas logrado tu objetivo de hacer crecer la barba, recuerda que ahora toca seguir cuidándola para que luzca sana. Recórtala con frecuencia y usa productos esenciales de calidad, desde champús hasta los mejores aceites acondicionadores. Seguro que siguiendo estos trucos te conviertes en la envidia de todos tus amigos.
¿Qué es lo que piensas?